El habitual problema de aparcamiento en el entorno del hospital clínico de Santiago está más cerca de aliviarse. El acuerdo entre Xunta y Raxoi permitirá la construcción de un aparcamiento, en altura y subterráneo, y la mejora de accesibilidad en el entorno del complejo hospitalario a través de un plan de interés autonómico (PIA) con un perímetro consensuado entre ambas administraciones.

También se acordó que, si es posible urbanísticamente, antes de la aprobación diera Plan de Interés Autonómico, se procederá a la ejecución del aparcamiento integrado y accesible dentro de la parcela del hospital con el fin de dotar, lo antes posible, plazas para el estacionamiento, así como la ejecución de la mejora del acceso desde Vuelta del Castro, que está prevista en el planeamento urbanístico vigente. De no ser posible antes de la aprobación del PIA, las dos administraciones coincidieron, en todo caso, en la necesidad de abordar ese aparcamiento integrado como actuación absolutamente prioritaria.

El acuerdo, que se desarrollará en convenios específicos para las diferentes actuaciones, estipula una aportación económica de 90%-10% entre la Xunta y el Ayuntamiento de Santiago para la ejecución de la totalidad de las obras.

Este acuerdo permitirá dotar de alrededor de mil plazas de aparcamiento al entorno del CHUS, donde ambas administraciones detectaron nos sus respectivos estudios de movilidad a problemática de flujos de circulación y de falta de plazas de estacionamiento en el área en la que se sitúa el complejo hospitalario.

El Ayuntamiento de Santiago, por su parte, se compromete la regular en la ordenanza fiscal correspondiente a exención del pago del IBI del Hospital Clínico y del futuro Centro de Protonterapia que se construye a un lado del centro hospitalario, una vez finalicen las obras de ese centro y las de ampliación del hospital.

En este acuerdo, también se recoge el compromiso de la Administración autonómica de cofinanciar actuaciones de saneamiento y abastecimiento municipal, con una aportación de 3,5 millones de euros, para paliar y reducir la discriminación del rural compostelano.