El Ayuntamiento de Santiago colocó una placa de recuerdo y homenaje a José Rodríguez en un de los bancos del parque de las Ciencias, sito en la calle de Ramón de Valle-Inclán. Esta placa se suma la otras dieciséis que homenajean otros científicos gallegos y no solo pretende reconocer su trayectoria académica, sino también su incalculable aportación a la comunidad científica gallega y, especialmente, a la Universidad de Santiago.

En palabras de la alcaldesa de Santiago, «Rodríguez dedicó su vida a explorar los confines del conocimiento científico, convirtiéndose en una figura esencial de la Ilustración. Hablar de Rodríguez es hablar de exactitud. Su genio radica en cómo consiguió conectar el mundo abstracto de las matemáticas con la realidad tangible. De cómo consiguió traducir el lenguaje del cosmos y hacerla comprensible.» La regidora exaltó la «su mente curiosa y su agudeza, que demostraron que la pasión por el saber no tiene fronteras y, en su caso, llega hasta el cielo. Su labor por la Astronomía y su afán por medir con precisión los misterios del mundo que habitamos ofrecen respuestas para campos, en aquel momento, desconocidos».

Coincidiendo con el bicentenario de su fallecimiento, la RAGC quiso poner de relieve que fue un científico en el sentido moderno del término y, para muchos, el primero de Galicia. La Academia destaca su lucha desinteresada por la ciencia.

José Rodríguez, científico gallego del año 2024

José Rodríguez González (Lalín, 1770 – Santiago de Compostela, 1824) fue uno de los científicos europeos más brillantes de su época, con grandes aportaciones, no solo a las matemáticas, sino también a la geometría, a la astronomía, a la geografía y a la mineralogía. Se formó en la Universidad de Santiago, donde logró, por oposición, una cátedra de matemáticas en el preparatorio de la Facultad de Medicina.

Además de su actividad científica tuvo una relevante actividad política. Se sumó a los liberales más progresistas y fue elegido diputado por Galicia en el año 1820. Se declaró a favor de la división provincial de Galicia con la creación de una quinta provincia con capital en Santiago de Compostela y mostró interés por promover tanto el conocimiento científico como el fomento de la industria.