Las obras de la pintora viguesa Tania Ciffer forman parte del buque oceanográfico Odón de buen, el más avanzado de Europa, construido en Vigo, su ciudad natal.

Este buque, que se dedicará a explorar el fondo marino y a realizar investigaciones científicas de gran relevancia, cuenta con varias de sus piezas, inspiradas completamente en el mar y el océano.

Cuando le propusieron el proyecto, le transmitieron que buscaban la serenidad y paz que caracterizan sus cuadros, para acompañar a los tripulantes y científicos en sus largas expediciones. Las obras de Tania Ciffer están ubicadas en las zonas de descanso y socialización, espacios clave donde quienes trabajan a bordo podrán relajarse después de jornadas intensas. Para Tania fue emocionante pensar que sus cuadros ayudarían a crear un ambiente de calma y conexión en un entorno tan exigente. Asegura que le pareció natural inspirarse en el mar, ya que este buque está destinado precisamente a estudiarlo. Los colores, las texturas y las formas evocan corrientes marinas, profundidades oceánicas y la inmensidad del agua. Entre las piezas destacan lienzos de gran formato, de 180×100 cm, 100×100 cm, 70×100 cm y un díptico de 70×100 cm cada uno, diseñados especialmente para adaptarse al espacio del barco.

Como viguesa, siente un orgullo inmenso de que este proyecto haya sido creado en su ciudad, que hayan contado con ella como artista y de que su arte viaje ahora en una misión tan importante para el conocimiento del océano. “Me emociona pensar que un pedacito de mí estará allí y viajará con mi obra», dijo Tania Ciffer.

Es una fusión perfecta entre ciencia, exploración y arte, y le llena de emoción saber que sus obras formarán parte de este viaje hacia lo desconocido. Hasta la Antártida sin ir más lejos.