Galicia liderará un proyecto de investigación sobre un plan pionero de cribado de cáncer de mama basado en la personalización del riesgo, en el que participarán 4.000 gallegas que comenzarán a ser convocadas a partir del próximo mes de febrero.
Este proyecto pionero, denominado MamoRisk, puede cambiar el paradigma de los cribados de cáncer de mama apostando por la personalización del riesgo. Esto supone pasar de un cribado por un criterio únicamente de edad y en el que la prueba que se realiza es una mamografía, a la posibilidad de diseñar un nuevo modelo de cribado multifactorial en el que se sumen una muestra genética y otros factores
de hábitos de vida que indiquen un nivel de riesgo individual para cada mujer.

Según el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, Galicia está avanzando en la medicina preventiva con proyectos de investigación muy ilusionantes como los cribados pilotos de cáncer de pulmón y de próstata, el cribado genómico neonatal, Cringenes, que analizará los genes relacionados con 300 enfermedades raras; y el Genoma Galicia, que compilará el ADN de 400.000 gallegos para identificar variantes genéticas de alto riesgo en enfermedades como el cáncer de mama.
La oncología de precisión permite personalizar el riesgo para mejorar los resultados en salud, apostando por la prevención y por la detección precoz de la enfermedad.

Características del proyecto MamoRisk
Galicia liderará esta iniciativa que se va a desarrollar en principio en 14
comunidades autónomas y en la que participarán 10.000 mujeres que habían pasado por los cribados de cáncer de mama, de las que, por lo menos, 4.000 serán gallegas. La financiación de este proyecto de prevención dirigida y de detección temprana, que tendrá una duración de dos años, alcanza los 1,2 millones de euros procedentes de fondos europeos a través del Instituto de Salud Carlos III.
La implantación de esta iniciativa implica una colaboración de profesionales de la salud pública, oncología, radiología, enfermería, epidemiología y genética. El grupo de investigación comenzará a enviar SMS durante el mes de febrero a las 1.000 primeras mujeres que ya habían participado en los programas de cribado.
El nuevo modelo de cribado que el equipo de investigación aplicará es similar la una calculadora donde, para cada mujer, se introducen todos los factores de riesgo o de protección ante el cáncer de mama conocidos hasta la actualidad: factores no genéticos (peso, altura, estilos de vida), factores genéticos y factores mamográficos. Así, el modelo asignará un número de riesgo personalizado la cada mujer (por ejemplo, a unas un 5 % de padecer cáncer de mama y a otra el 90 %), clasificándolas en diferentes niveles de riesgo: alto, intermedio y bajo.
La investigación necesita contar con 4.000 casos positivos y 6.000 negativos. A tal efecto, se invitará a formar parte del proyecto a mujeres que habían participado en los cribados de cáncer de mama de las 14 comunidades y que en 2018 habían sido negativas, analizando su historia
hasta el 2024, para determinar cuales dieron positivo en este tiempo y cuántas siguen dando negativo.

A las mujeres que participen en el proyecto se les hará una muestra genética con la que identificar más de 300 genes relacionados con cáncer, además de una encuesta sociodemográfica y de hábitos de vida.
A las 10.000 participantes se les aplicará el nuevo modelo, para comparar los valores de riesgo entre pacientes con cáncer y mujer sanas.
Los resultados ayudarán a identificar las mujeres con alto riesgo de cáncer de mama que se puedan beneficiar de un seguimiento más intensivo y cuidadoso y de tratamientos quimiopreventivos o estrategias de reducción de riesgo.
En función de los resultados de la investigación que valide el modelo, la Xunta decidirá como diseñar un nuevo modelo de cribado de cáncer de mama personalizado.