2025. Se acercan las Navidades, y en muchos casos eso implica tener más tiempo para leer o pasar tiempo conectados a las redes sociales o enviando felicitaciones a través de nuestros smartphones. El Doctor Pérez Varela, Director Médico de la clínica dental MAEX Pérez Varela, en Santiago de Compostela, recuerda que el descanso y la desconexión deben ir acompañados de un uso responsable de las pantallas. No solo por la salud de la espalda o del cuello, sino también por la salud de la mandíbula y de la mordida, un aspecto mucho menos conocido entre la población general.

El Dr. Juan Carlos Pérez Varela, doctor especialista y referente internacional en ortodoncia avanzada,advierte que los hábitos digitales modernos, marcados por la inclinación prolongada de la cabeza para mirar el móvil, están generando efectos que empiezan a aparecer en la consulta odontológica.
“En los últimos años se ha descrito el fenómeno de text neck, una postura prolongada con la cabeza inclinada hacia abajo para mirar el móvil. Sin embargo, un estudio de 2022 en jóvenes sin problemas previos no encontró cambios importantes en la mordida estática tras adoptar esa postura. Es decir: mirar el móvil, por sí solo y a corto plazo, no provoca una mala mordida de la nada. Aun así, otros estudios sí han observado que, al inclinar mucho la cabeza, la mandíbula hace micro-movimientos y los dientes “tocan” antes en zonas diferentes(a veces delante, a veces atrás), aunque el número total de contactos no cambie mucho. Además, cuando pasamos muchas horas en mala postura, los músculos del cuello y de la masticación se activan más, lo que puede generar cansancio y que la mandíbula no esté tan relajada” explica el ortodoncista. Aunque existe debate científico y “la postura del móvil no es la única causa de maloclusión, pero sí puede favorecer molestias, tensión muscular y un mal reparto de fuerzas, sobre todo si la mordida ya era inestable o en niños y adolescentes en crecimiento”, precisa Pérez Varela.

Navidades con más pantallas: un escenario propicio para el bruxismo de vigilia
Un excesivo uso del smartphone también ha sido relacionado con un aumento del bruxismo de vigilia, es decir, la costumbre de apretar los dientes durante el día, ya sea de forma consciente o inconsciente. Diferentes investigaciones han mostrado que un uso intensivo de las pantallas puede incrementar el nivel de concentración y estrés, factores asociados a este tipo de bruxismo. Además, pasar más tiempo con dispositivos electrónicos puede afectar a la calidad del sueño, algo que repercute directamente en la relajación de la musculatura mandibular nocturna.

El Dr. Pérez Varela advierte que la relación no es automática, pero sí plausible: “Más tiempo de pantalla en Navidad no significa seguro bruxismo, pero sí más riesgo, sobre todo cuando se combina con estrés, falta de descanso y ausencia de pausas”.

Tendencia en consulta: jóvenes con molestias mandibulares ligadas a hábitos digitales
Cada vez es más frecuente que pacientes jóvenes acudan a consulta por percepciones como “mordida rara”, cansancio al masticar o dolor en las sienes. Muchos de ellos describen rutinas de uso intensivo del móvil, a menudo con la cabeza inclinada de forma pronunciada hacia delante. El especialista subraya que el dispositivo no actúa como un causante directo de todos los problemas oclusales, pero sí aparece como un factor añadido de sobrecarga en personas con una estabilidad mandibular comprometida. “El móvil no es culpable de todo, pero está muy presente en pacientes con tensión y sobrecarga muscular”, explica.

Infancia y adolescencia: la postura importa, y mucho
Durante las vacaciones de Navidad aumenta el tiempo libre y, con él, la exposición a pantallas entre niños y adolescentes. A juicio de los especialistas, este periodo debería aprovecharse para fomentar buenos hábitos posturales, no solo para prevenir problemas cervicales, sino también para favorecer un desarrollo facial y mandibular equilibrado.
El especialista en ortodoncia recuerda que mantener la pantalla a la altura de los ojos, hacer pausas regulares para estirar el cuello y evitar el uso de dispositivos justo antes de dormir son medidas sencillas que ayudan a reducir la tensión del sistema masticatorio. También destacan la importancia de recordar que la posición de reposo de la mandíbula implica labios juntos y dientes separados, algo que muchos jóvenes olvidan cuando están muy concentrados frente al móvil o la tableta. Las organizaciones de salud, además, recomiendan limitar el tiempo de pantalla recreativa a dos horas al día entre los 5 y los 17 años. “Jugar, hablar, reír y masticar turrón con buena postura también ayuda a crecer mejor que pasar horas encorvados”, insiste Pérez Varela.

Cuándo preocuparse y cuándo pedir una revisión profesional
El Director Médico de la clínica MAEX Santiago explica que la tensión leve relacionada con el uso del móvil suele remitir con descanso y cambios sencillos en la postura. Sin embargo, recomienda solicitar valoración profesional cuando el dolor se mantiene durante más de una o dos semanas, cuando aparecen chasquidos o bloqueos al abrir la boca, o si el paciente detecta que los dientes ya no encajan como antes. También conviene consultar si los dolores de cabeza se vuelven frecuentes y parecen vincularse con la mandíbula. “La Navidad debería ser para conectar con las personas, no solo con el Wi-Fi. Si miramos más a los ojos y menos al móvil, y lo hacemos con buena postura, el regalo para nuestro cuerpo y nuestra mordida será mucho mayor. Y ante la duda… mejor una revisión que quedarse con la incógnita”, señala.
Estos síntomas están descritos en los trastornos temporomandibulares y pueden requerir un diagnóstico preciso para evitar complicaciones mayores.
En un momento del año en el que los hogares recibirán nuevos smartphones, consolas, libros electrónicos y regalos tecnológicos, desde la clínica MAEX Pérez Varela nos recuerdan que la modernidad digital no es incompatible con la salud oral. El desafío está en gestionar bien los hábitos, proteger la postura y acudir a revisión cuando algo no encaja. “Estas fiestas son un buen momento para mirar más a los ojos y menos a la pantalla. A veces, el mejor regalo es una postura adecuada y
una mordida equilibrada”, concluye Pérez Varela.