El artesano Aitor Martínez López de Arbina (Tomiño), especializado en tornería de madera, resultó ganador en la categoría Producto y la Fundación Artesanía de Galicia obtuvo el reconocimiento en la categoría Promociona a Entidades Públicas por su proyecto “Artesanía en el Plato”. La artesana Sandra Vilas, del taller Boina Gallega (Santiago de Compostela) resultó finalista en la categoría Emprendimiento de los XVIII Premios Nacionales de Artesanía 2025.

El tornero Aitor Martínez López de Arbina recogió su Premio Producto 2025 por su colección Mundos, un trabajo que el jurado calificó de “gran sensibilidad técnica y potente visión conceptual”. Su trabajo se basa en la utilización de la materia prima sostenible y con la trazabilidad documentada a través de la herramienta Fortra con la idea de poner en valor a origen y la materia de la que se dispone en el territorio. En el año 2024 Aitor ya resultó ganador del Premio Joven Promesa del Círculo Fortuny, fue finalista del Premio Artesanía de Galicia 2024 y también del Premio Producto.

El director general de Comercio y Consumo, Gabriel Alén, y la gerente de la Fundación Artesanía de Galicia , Elena Fabeiro, recogieron el Premio Promociona para Entidades Públicas por el proyecto Artesanía no Prato, pionero en España y en el que se hacen converger artesanía y gastronomía con el objetivo de incrementar la singularidad, la exclusividad y el valor añadido de las propuestas resultantes. Se trata del cuarto galardón que recibe la Fundación Artesanía de Galicia en esta categoría, ya que resultó ganadora en los años 2023, por la iniciativa Corazón de la Artesanía, el encuentro de la Artesanía Tradicional y Popular de Galicia, que se celebra en los Pendellos de Agolada; 2016, por el proyecto Enredadas que busca la diversificación del oficio tradicional de las redeiras gallegas para abrir nuevos mercados en ámbitos como la moda o la decoración; y en el año 2012, por conjugar el apoyo a los oficios tradicionales con una apuesta por la innovación y adaptación a los nuevos mercados. Durante su intervención, Gabriel Alén destacó que el proyecto Artesanía no Prato se basa en tres agentes muy vinculados al territorio como es el producto agroalimentario, los cocineros y cocineras y las piezas de Artesanía de Galicia.

En cuanto a Sandra Vilas, titular del taller Boina Gallega (Santiago de Compostela), resultó finalista del Premio Emprendimiento por su empresa Claudinas, fieltros esculpidos y artesanales, especializado en el trabajo de piezas en fieltro. En su empresa consigue escalar la producción para grandes marcas como Loewe sin renunciar al trabajo artesanal, y consolida un modelo de emprendimiento que une identidad local, excelencia técnica y visión de futuro. La ganadora de esta categoría fue la marca Barrikupel, por su emprendimiento en el rural y el empleo de materiales reciclados.





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